En la primera parte de este artículo tratamos los beneficios físicos de la práctica marcial. En esta parte nos centraremos en aspectos más específicos, los beneficios de la práctica de Budo Taijutsu-Ninjjutsu según los profesionales médicos.
Por Raúl Rodríguez Vinagre
Desde un punto de vista médico los sistemas a los que beneficia son los siguientes:
Desde un punto de vista médico los sistemas a los que beneficia son los siguientes:
Sistema cardiovascular:
Al hacer ejercicio el cuerpo reacciona con un mayor movimiento del caudal sanguíneo: el corazón late más deprisa y se produce vasodilatación de los capilares. A la larga el corazón se adapta al ejercicio continuo:
Aumenta el volumen sistólico (la cantidad de sangre puesta en movimiento por minuto) y esto hace que las cavidades del corazón se ensanchen y se fortalezcan las paredes del músculo cardiaco, mejorando su contracción.
Se elimina mejor las sustancias nocivas del propio sistema circulatorio (se deshecha el colesterol y se evitan posibles problemas cardiacos) y de los músculos.
Los músculos además utilizan más eficazmente el oxígeno en sus procesos metabólicos.
Incrementa la red capilar llegando a más vasos y a más zonas del organismo, de modo que mejora la limpieza y la alimentación celular. Como consecuencia de todo esto se resiste más y el corazón está más sano, se evita la arterioesclerosis y otros problemas circulatorios.
Sistema respiratorio:
A la larga el sistema respiratorio se adaptará:
Aumentando la fuerza y la resistencia de los músculos respiratorios.
Se mantiene limpia y flexible la superficie alveolar con lo que el intercambio gaseoso es más eficaz.
Se mantiene más tiempo el aire inspirado en los pulmones con lo que se aprovecha mejor todo el oxígeno.
Como consecuencia de todo esto cada vez se puede hacer esfuerzos mayores, la recuperación se hace antes y los pulmones están más limpios.
Sistema digestivo:
Mejora la función gastrocólica, regula y fortalece la perístasis, Tonifica el páncreas y el hígado. Disminuye síntomas gástricos. Previene la obesidad. Facilita la digestión, favorece el tránsito intestinal regulando hábitos de evacuación y evitando el estreñimiento.
Sistema nervioso:
Sistema nervioso:
El ejercicio exige una mayor atención e información de estos sistemas, puesto que el cuerpo está en situación de estrés.
Para mantenerse atento a esta situación “peligrosa” el mismo cuerpo reacciona vertiendo en la sangre más hormonas que excitan a los demás sistemas funcionales.
Para mantenerse atento a esta situación “peligrosa” el mismo cuerpo reacciona vertiendo en la sangre más hormonas que excitan a los demás sistemas funcionales.
A la larga el organismo se adapta:
Con una mayor agilidad en las reacciones de alarma de cualquier tipo.
Mejorando la sinapsis (interconexión) neuronal y de este modo se reduce el tiempo del proceso percepción-decisión.
Como consecuencia de esto se mejora la velocidad de los movimientos y la coordinación motriz. Se aprenden mejor los gestos técnicos, bien sean deportivos, laborales o cotidianos, con una disminución de la torpeza motriz.
Sistema endocrino:
Regula y mejora las funciones endocrinas: glándula hipófisis, tiroides, testiculares, ováricas, suprarrenales y pancreáticas que contribuyen a la mejoría de las funciones del organismo. Mejora la tolerancia a la glucosa.
Sistema inmune:
Sistema inmune:
Corrige alteraciones, aumenta el número y capacidad de linfocitos T. Aumenta las inmunoglobulinas y el numero y actividad de los macrófagos. No se sabe exactamente cómo incrementa el ejercicio la inmunidad contra ciertas enfermedades, pero hay diferentes teorías. Un reciente estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de California (EE.UU.) ha comprobado que el ejercicio aumenta, en el momento en el que el organismo aún desarrolla las defensas, (edad infantil y adolescencia), el número de glóbulos blancos y de células NK ("Natural Killer", tipo de linficito).
Sistema locomotor:
Sistema locomotor:
El ejercicio físico obliga a trabajar más al músculo y el cuerpo reacciona utilizando más fibras musculares y haciéndolas más resistentes.
A la larga el cuerpo se adapta:
Haciendo más resistentes las fibras musculares y a la vez más flexibles (si se trabaja la flexibilidad específicamente, claro).
Mejorando la eficacia de los procesos metabólicos y ahorrando energía sin producir tantas sustancias de desecho.
Se fortalecen los tendones, las articulaciones son más estables y los huesos se fortalecen.
Como consecuencia se pueden manejar cargas mayores, se producen menos lesiones cotidianas y se previenen la artrosis y dolores musculares y articulares debidas a la pasividad en la edad adulta.
Metabolismo :
En la última parte del artículo trataremos los beneficios psicológicos de la práctica del Budo Taijutsu-Ninjutsu.
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